Carolas


El lunes es para mí, con diferencia, el peor día de la semana.
Pensándolo mejor es el peor día del mundo.
Sin embargo, hoy a primera hora de la mañana y nada más incorporarme al trabajo me encuentro con una gratísima sorpresa, qué gratísima… ni nada, una sorpresa maravillosa que arregló el día.


Voy a contarles la historia:

Una amiga, de la que ya hablé el viernes, ha debido quedar muy contenta con su collar "no demasiado largo y discreto con algo rojo"




Esta amiga tiene una "particular" empresa.
Este fin de semana se ha puesto manos a la masa y me ha preparado lo que yo voy a denominar una merienda para dos. Carol, que así se llama, hace Carolas, unas sabrosísimas galletas.


¿no me digan que no son una monería?










Las galletas que ha hecho para mí tienen formas de: mamá gallina, sus polluelos, mariposas, flores, setas y huevos ...
 





Esta es la tarjeta de Carol por si alguien tiene alguna fiesta pendiente y quiere contar con sus galletas.
 


 Sólo espero que su collar le haya gustado, aunque sólo sea, la mitad de lo que a mí me han gustado sus Carolas.




GRACIAS JUAN CARLOS,
GRACIAS CAROL.



4 comentarios:

Gustavo dijo...

Certifico que el sabor de las galletas es tan bueno como su presencia. Un placer.

Besos.

Sonia Otero dijo...

Si el collar es muy bonito, desde luego las galletas son estéticamente estupendas, seguro que su sabor merece la pena destrozar estas pequeñas esculturas gastronómicas.

andromeda dijo...

Qué cosa tan apetecible!. El collar me encanta porque me comería los dos corazones rojos pasión de ese cristal que tanto me gusta pero las galletas son un cromo, una monada...en una merienda de amigas serían todo un acierto, sólo por ver las caras de todas cuando se sentaran a la mesa. Mi enhorabuena a la artesana pastelera, y como no a la MD crocheteadora. BESOS PARA LAS DOS.

Estibalitz Diaz de Durana Arias dijo...

muchas gracias por la visita, me alegro que te guste!
PRECIOSO TU TRABAJO, ENHORABUENA!
un saludo